La Cantimplora verde

Con la llegada de las fechas veraniegas, la posibilidades de que vayamos a patear con un sol de justicia se multiplican y si encima nos plantéanos hacer grandes rutas de varios días (tipo Camino de Santiago o cualquiera de los GR que existen), la posibilidad que nos toque patear con calor, mucho calor, es muy alta.

En vista de que he visto a más de uno que lo de andar en estas condiciones no lo tiene y claro, mi intención es hacer dos post donde hablar sobre que tener en cuenta cuando no tenemos más remedio que Patear con calor, mucho calor.

Efectos positivos del Sol:

• La vita mina D es necesaria para el organismo, y la forma más rápida de obtenerla es a través del Sol. La piel sintetiza la vitamina D gracias a los rayos ultravioleta B (los llamados UVB) que aparecen en la radiación solar. La piel transforma la forma inicial de la vitamina D en la forma activa que se conoce como D3. La piel es el único tejido humano que puede hacer esta transformación y liberar en la sangre la forma activa de la vitamina (que pasaría a tener características de hormona). Los demás tejidos usan la vitamina que viene en alimentos como la leche, el salmón, pero a un nivel de eficiencia considerablemente bajo. Así, se considera que la luz ultravioleta tiene efectos dañinos, pero 10 minutos diarios sin protección, son, según los científicos del campo, suficientes para almacenar la cantidad adecuada y saludable de vitamina D, la cual es buena para la curación del raquitismo, ataca a células infectadas con la bacteria de la tuberculosis y tiene el potencial de ayudar en la secreción y regulación de la insulina, el buen funcionamiento del corazón, la presión arterial, la fuerza muscular y la actividad cerebral. En total, 36 órganos se benefician de su presencia en cantidades suficientes (más información aquí), además de intervenir en el proceso de asimilación del calcio y el fósforo (fortaleciendo los huesos) y de aumentar la capacidad para obtener energía a partir de los hidratos de carbono aportados por los alimentos.

• El Sol también transporta en la radiación solar rayos infrarrojos (que son los responsables del calor). Al llegar al cuerpo humano aumentan la temperatura local, dilatando los vasos sanguíneos periféricos, favoreciendo la circulación sanguínea, aumentando el número de glóbulos blancos (células defensivas) y de glóbulos rojos (distribuyen el oxígeno) en la sangre y al hacernos sudar, ayudan a eliminar toxinas.

• Otros de los beneficios de los rayos del Sol son la Estimulación de la producción de hormonas sexuales, posee efecto antirreumático, estimula las defensas, posee efecto antidepresivo y tiene efectos dermatológicos en algunas enfermedades como dermatitis, psoriasis, vitiligo (estimula la producción de melanocitos) y provoca una mayor asimilación de los nutrientes.

Efectos Negativos del Sol

Pero no todo los efectos del sol positivos, cuando nos exponemos a los rayos del sol, se puede obtener un efecto benéfico o perjudicial, lo cual depende de diversos factores como la duración, frecuencia, intensidad del sol y vulnerabilidad de una persona. Así, la exposición prolongada a los rayos solares es perjudicial para la salud, por afectar a la piel, tanto a la epidermis (capa exterior) como a la dermis (capa interna contigua a la epidermis).

El principal causante de los problemas con el exceso de Sol son los rayos ultravioleta, los cuales reaccionan con los distintos constituyentes celulares, principalmente las proteínas, los ácidos nucleídos y las membranas. Los rayos Ultravioleta (UV) se clasifican en tres grupos:

UVA Actúan sobre los melanocitos y intensifica el tono de la melanina. Esta radiación es la responsable del bronceado directo e inmediato y son los culpables del envejecimiento prematuro de la piel, alergias solares y reacciones fototóxicas.

UVB: Son los responsables de la producción de melanina, así como del bronceado lento, intenso duradero, y de la aparición de eritemas. En dosis elevadas pueden dañar las células y provocar cáncer de piel. Causan quemaduras (enrojecimiento), insolaciones y golpes de calor a corto plazo; siendo responsables a largo plazo de las alteraciones genéticas o mutación del ADN

UVC: Se trata de radiación muy calórica y, por tanto, muy peligrosos, no influyendo en el bronceado pero sí en la aparición de cáncer de piel. No tienen actuación sobre piel, ya que en su práctica totalidad son absorbidos en la atmósfera (por eso son muy peligrosos en la Luna, pero ese no es un tema que nos preocupe).

La combinación de la acción de los rayos UVA y los rayos UVB se relacionan con el desarrollo del cáncer de piel o cáncer cutáneo.

Hay que tener en cuenta que la cantidad de radiación solar recibida va a depender de varios parámetros, entre los que se encuentra la altitud, la estación del año, la situación geográfica y la hora del día. También dependerá de la absorción atmosférica (el espesor de la capa de nubes, la contaminación de la atmósfera y la humedad) y la llamada radiación indirecta (reflejada por las superficies, como la nieve, las superficies arenosas o las láminas de agua).

Además de todo lo anterior, hay que tener en cuenta tres cosas:

Todas las personas se ven afectadas por la exposición al sol, pero las personas de piel negra u obscura y los adultos son menos sensibles al sol; mientras que las personas de piel blanca o clara y los niños, contrariamente, son más sensibles a los efectos perjudiciales de rayos solares.

El bronceado no nos protege contra los rayos UVA y UVB, por lo que el uso de crema de protección solar siempre es necesario si nos exponemos a los efectos del sol con frecuencia.

la exposición al sol se considera uno de los factores de riesgo más importantes para el cáncer de piel (melanoma).

En que momento del día nadar

Si  podemos elegir las horas para patear, hay que tener en cuenta el sol antes de las diez del mediodía y después de las cinco de la tarde es el que menos quemaduras os va a producir. Si entrenamos para ir a darnos un buen pateo, también es importante adaptarse a los pateos bajo el Sol. El primer día empezaremos tomando el Sol 15 minutos, y a partir de este primer día podemos alargar 10 minutos diarios, consiguiendo generar a los 10 días una protección natural. Pero hay que tener en cuenta el tipo de piel y su capacidad de adaptación, que es mayor en personas morenas que en rubias.

Protector Solar

Como ya hemos dicho más arriba, el bronceado no nos protege contra los rayos UVA y UVB, por lo que el uso de crema de protección solar siempre es necesario si nos exponemos a los efectos del sol con frecuencia. Así, lo ideal si pateamos bajo el Sol es ponerse crema Solar. Con ella nos debemos proteger cara, los brazos y las piernas (si llevamos alguna otra parte descubierta mientras pateamos, también poner crema solar).

Es importante tener en cuenta que las cremas solares no son una barrera contra el sol, lo único que hacen es prolongar el tiempo que podemos estar bajo el sol, dependiendo de cómo incida el sol y de nuestro tipo de piel. Un factor de protección 10 significa que puedes multiplicar por 10 el tiempo de exposición al sol: es decir, tomar el sol con una crema de factor 10 durante 150 minutos equivale a tomarlo sin crema durante 15.

Para saber que factor hemos de ponernos, hemos de tener encuanta lo que se denomina fototipo que es la capacidad de la piel en asimilar la radiación solar y que va a depender de su pigmentación. Su clasificación oscila entre I y VI:

Fototipo I: personas de piel rosada y muy pálida, generalmente pelirrojos o rubios con ojos verde claros o azules, con una piel que casi siempre se quema, apenas se broncea y que suelen sufrir reacciones fotoalérgicas al exponerse de forma prolongada a la luz solar directa. Siempre protección entre 25 y 30.

Fototipo II: personas de piel clara, ojops azules, verde o marrón claro y de cabellos claros. Al igual que las de fototipo I, apenas se broncean, con reacciones fotoalérgicas en caso de exposición prolongada al sol. Siempre protección superior a 20.

Fototipo III: es el más común, correspondiendo a personas con cabellos castaños y pieles intermedias, que enrojecen primero y se broncean después de su exposición al sol. Con piles claras en invierno y bronceada en varano y ojos castaños. Siempre protección 20 y 15.

Fototipo IV: pertenece a las personas de cabellos morenos o negros, de pieles oscuras que se broncean con rapidez al exponerse al sol directo. Siempre protección 15 y 10.

Fototipo V: personas cuya piel es más morena que la del fototipo IV. Siempre protección 10 y 6.

Fototipo VI: típica de personas de piel negra.

Dejo para un próximo post que llevar cuando andamos bajo un sol de justicia (gorro, gafas de Sol y el tema del agua), tres temas que son tan importantes como lo visto hasta ahora.

Para saber más:

Como tener una buena experiencia solar del blog el correo del Sol se puede ver aquí.

Consejos para cuidar tus ojos en verano de Vissum Corporación Oftalmológica se pueden ver aquí

La relación entre la vitamina D y el Sol se puede leer aquí

Artículo “América está equivocada es sus políticas de exposición al sol” aparecido en la revista australiana Nautilus se puede leer aquí

Una presentación muy interesante sobre los “Beneficios y efectos nocivos del Sol” se puede ver aquí .

Guía de la protección solar se puede ver aquí